Así nació nuestra escuela Nº 84 “Manuel
Belgrano”
El
colegio hogar San José y su escuela anexa Manuel Belgrano.
Hace
muchos años la actual floreciente Ciudad de Chajarí contaba escasa población,
algunas viviendas agrupadas alrededor de la estación
Foto:
http://origenes.online/colonia-villa-libertad-chajari-historia/
y
las otras diseminadas hasta confundirse con la colonia, según un antiguo
manuscrito el nombre de Chajari
deriva de la palabra chajá, ave zancuda
que junto con el tero y la garza vivían en bandadas en los bañados y esteros de
aquellos lugares.
Foto:
https://www.fotosaves.com.ar/Anseriformes/Fotos_Chaja.html
El
pueblo era más conocido con el nombre de Villa
libertad nombre que llevaba también la colonia, está tuvo como colonizadores
los italianos que contribuyeron directamente al progreso de la zona, por
cultivar el maní, el tártago y el trigo, lo que dio origen a las grandes fábricas
de aceite que han hecho de Chajari uno de los pueblos más comerciales y
progresistas de Entre Ríos, la actual iglesia parroquial de Santa Rosa de Lima fue costeada y construida por los
buenos colonos quienes después de la ruda labor del día dedicaban algún tiempo y coraje para levantar sus
propios templos donde los domingos cantaban las alabanzas del señor con voces
robustas que parecían exteriorizar la firmeza de su fe, los días festivos el
pueblo se destacaba por el enorme cantidad de vehículos que paraba en las
inmediaciones del templo, a un pueblo tan católico, le faltaba quien se
preocupara para conservar las verdades de nuestra divina religión, corrían los
años 1900, 1915, 1919
Foto:
https://www.chajarialdia.com.ar/?p=42309
El
entonces cura párroco de la iglesia Santa Rosa de Lima, el reverendo padre José Amill, se interesó
particularmente por la niñez.
Su
corazón de pastor comprendía que el más valioso regalo era establecer en su
pueblo una congregación religiosa consagrada a la educación e instrucción
José
Amill quien tuvo la ocasión de conocer el espíritu de las Hermanas Franciscanas de Gante mientras fue su capellán el
Instituto Cristo Redentor, había solicitado con insistencia y repetidas veces a
la reverenda provincial Madre Práxedes, delegar a alguna de sus hermanas para
colaborar con él, en la Viña del señor, el excelente sacerdote encontró
verdaderos puntales en la acción en la Señora
Margarita V de Siburo, Don Antonio Roullier y el Doctor Roberto Vilar.
Doña Margarita Siburo e hijos ofrecieron en
donación su parte en la edificación y terreno de lo que hoy es el Colegio, pero
ello no era todo pues había que comprar al Señor Bonelli, su parte, lo que se
hizo con el aporte de $ 7.000 moneda nacional de la Central de la Congregación
en Paraná, ello consistía en el almacén
y galpones “Siburo”, con bastante capacidad para ser transformado luego en
una verdadera casa de educación.
Poco
después el Padre Amill y el Señor Roullier hicieron una colecta en el pueblo y
en las colonias, juntando unos $ 5.000
de los cuales $ 3.000 fueron destinados a la compra de primera
necesidad.
En
la madrugada del día 19 de diciembre de
1919, tres religiosas provenientes del Instituto Cristo Redentor de Paraná,
emprendieron la última etapa de su viaje embarcándose en Concordia con destino
a Chajarí, ellas eran la Madre Valentina,
y las hermanas Wilfridis y Gilberta.
La
belleza del paisaje, con sus esbeltas palmeras, su dorado citrus y sus verdes olivares,
acrecentó las ansias que sentían esas mensajeras de Cristo por llegar a su
nuevo campo de apostolado.
Desembarcaron
en Chajari en las primeras horas de la calurosa tarde de aquel día 19 de
diciembre de 1919 a las 13 y 30 hs, fueron recibidas por el hermano del Padre,
Don Francisco, quien las llevo a la casa parroquial, donde almorzaron, las habían acompañado tres huerfanitas,
así eran seis, entre todas.
A
las tres de la tarde visitaron a la iglesia donde entonaron un Te Deum, en
acción de gracias, luego la Superiora, en un acto de Consagración al Corazón de
Jesús para pedir su bendición, para la
nueva casa.
Después
de esa función la llevó el Padre Amill al futuro colegio, así las hermanas se
instalaron como podían, no habiendo llegado los equipajes se encontraron en
gran apuro, debiendo contentarse con un balde prestado como palangana, un catre
para mesa y escritorio y uno cajones para asientos, pronto compraron lo más
necesario y principiaron el arreglo y la limpieza de la casa.
Las
primeras semanas eran tristes y monótonas para las hermanas, pero poquito a
poquito se produjo algún movimiento, varias vecinas visitaron el colegio y
algunas alumnas se dejaron matricular, el día 18 de febrero llegaron a esta otras tres hermanas: Estela, Floriberta y Madre Salomé, así se completó
el personal, a partir de ese momento el Servir,
Alabar y Agradecer fue la buena noticia de una nueva tienda que se levantó
en lo que hoy es Chajari para donar hospitalidad.
Luego
cada una se preparó con toda diligencia para su respectivo oficio y día, tras
día, se vio aumentar el número de matriculadas.
El primero de marzo, se
abrieron las clases con más de 60 alumnas, había poca
comodidad y la maestra de labores se vio obligada a dar sus lecciones de corte
en una mesita prestada, en el comedor de las pupilas,
Ese gesto antiguo pero muchas veces olvidado
qué significa recibir al otro sin imponerle condiciones, dejándolo venir con
sus dones y sus carencias, recibiéndolo con sus particularidades, el hogar San
José se constituyó en la casa escuela de muchas niñas que de lunes a sábado, luego
de las actividad del aula convivían en los amplios espacios del internado, cómo
se lo denominaba cotidianamente, esto significaba compartir la mesa del comedor,
participar de los juegos en el espacioso patio, respetar los turnos a la hora
del baño, colaborar con la limpieza de los ambientes que frecuentaban y antes
de la hora del estudio se debía asistir al lavadero, donde en una atmósfera
impregnada de olor a jabón y poblada de mujercitas ruidosa se resolvía la
higiene de las prendas personales, muchas de esas niñas provenían, en su
mayoría del ámbitos ámbitos Rurales o de pequeñas poblaciones de la región del
noreste entrerriano y del sur de la provincia de corrientes en todos estos
momentos están presentes las hermanas con una mirada que sostenía cuidaba y
animaba
El
día 8 de marzo, se celebró por primera vez la santa misa en la casa y luego
permaneció el Santísimo Sacramento.
El
19 de marzo, fiesta de San José, tuvo lugar en la iglesia el acto imponente de
la primera misa del Padre Lanaro, vecino de esta parroquia , el banquete tuvo
lugar en el salón de colegio.
Al
principio del mes de abril, día 13, se efectuó la entronización del San Sagrado
Corazón y se bendijo la casa y en esa misma fecha llegó a esta la Madre
provincial y Rita Dure, Esta última
se quedó como ayudante de labores.
El
25 de mayo fue amenizado por una fiestita patria por parte de las alumnas, en
el mes de julio, nos visitaron para abrir un colegio en Paso de Los libres.
El
30 de agosto, día de Santa Rosa, se dio en el colegio la primera velada la que
tuvo un feliz éxito, en los últimos tres meses se prepararon las hermanas para
las los exámenes y para la fiesta escolar, durante el año hicieron la primera
comunión 26 niñas, con la bendición de Dios, la protección de San José y el
trabajo asiduo de las hermanas, se vio crecer cada día el número de alumnas y
se pudo contar con 103 alumnas en los grados, de las cuales 11 eran pupilas y 6
medio pupilas 16 señoritas cursaban corte confecciones y labores, 15 alumnas
estudiaron música, trabajando así se ha
podido allanar algo, las deudas que la casa había contraído al principio del
año.
El
21 de noviembre, fiesta de la Presentación, se fundó la congregación: Hijas de
María y la del Niño Jesús de Praga, la función se hizo en la iglesia.
El
28 de noviembre se clausuraron los cursos y tuvo lugar un acto escolar el cual
obtuvo un óptimo resultado, pues los concurrentes y las alumnas salieron todos
contentos y satisfechos.
En
los primeros días de diciembre salieron para Villaguay las hermanas :
Wilfridis, Floriberta, Gilberta y la Madre Salomé, dos de ellas siguieron a
Paraná para estudiar.
Los
últimos días del año de 1920 pasaron sin novedades, se trabajaba despacio,
dando algunas lecciones particulares, se dejó en construcción un edificio que
debe servir de Capilla y otro cuerpo para dormitorio de las pupilas.
El
25 de diciembre de 1924 se colocó la piedra fundamental en la actual capilla y
el 18 de mayo de 1930 fue inaugurada y bendecida La nueva construcción.