La máquina del tiempo.
Hola chicos, mi nombre es Luis y he venido a invitarlos a realizar un viaje en esta increíble
máquina del tiempo.
Prepárense para la aventura, abróchense cinturones y
¡aquí vamos!
Hoy viajaremos al año 1.872 para conocer los orígenes de
nuestra querida ciudad de Chajarí, ¿están listos?
Todo comenzó allá por el año 1.872, más precisamente, el 28
de mayo, cuando se promulga la ley N° 1875 por la que se manda fundar la Villa
Libertad.
La Colonia Villa Libertad se encuentra a orillas
del río Uruguay y está atravesada por
el Ferrocarril Argentino del Este. Estas tierras han sido escogidas
por encontrárselas perfectas para la agricultura: aquí pueden cosecharse papas,
cereales, hortalizas, algodón.
¡Ahora solo falta poblar!
En el año 1.875 Pablo
Stampa, empleado en la Comisaría General de Inmigración, viaja a Italia con instrucciones precisas:
OFRECER LOTES DE CHACRAS A FAMILIAS, MÁS UN ADELANTO DE SEISCIENTOS PESOS.
Unas 600 familias
dan el sí. De ellas, sesenta serán seleccionadas para fundar la colonia de Villa Libertad. Las mismas han
sido elegidas en base a su número (más de cinco integrantes) y su aptitud para
el trabajo agrícola.
Los primeros colonos, treinta y ocho familias, parten
de Génova (Italia) en 1875 y arriban a una tierra que luce
completamente diferente a lo que han visto sus vidas enteras.
Cada familia recibe una parcela de tierra y herramientas
para realizar trabajos de agricultura.
Las casas de los primeros colonos están hechas de postes de
ñandubay y terrones de barro.
Algunos, han traído de Europa incluso algunas semillas de
tabaco, que utilizan para consumo propio. Varios afluentes proveen al pequeño
agrupamiento de agua potable y cristalina, que los colonos acarrean a sus casas
en carros hechos por ellos mismos. La zona es también perfecta para cazar
ciervos, venados, jabalíes, pavos y perdices.
Hombres, mujeres y niños trabajan la tierra.
Todo es nuevo para estas familias, quieren acompañarse y
ayudarse, por lo que distribuyen las tareas: Los hombres amansan los bueyes entregados por
el gobierno y conducen el arado. Las mujeres y los niños recogen el maní y
cuidan las vides y las gallinas.
Con un floreciente estado de salud y cosechas prometedoras los
primeros colonos de Villa Libertad tienen la vida entera por delante.
¡Esta
historia recién comienza!